domingo, 21 de febrero de 2010

Punishment and redemption (Castigo y redencion)




Me he castigado durante una semana. No me he quitado de la cabeza en todo este tiempo a la maldita piedra. No he dejado de pensar en las mil maneras que pude esquivarla, en como hubiese sido todo diferente, en como, seguramente, hubiese disfrutado y participado al dia siguiente en la carrera. No he conseguido alejar la idea de tener que esperar un año entero par poder volver a intentarlo... hasta hoy...

He copiado mil veces "No chocare contra mas piedras"...



pero no ha sido suficiente... necesitaba un castigo mayor, uno a la altura del fracaso... Y una media marathon ha sido la respuesta.

Vale, es cierto, ya estaba inscrito antes de la Bassella Race, pero recordad que la lesion fue en mi rodilla y tobillo izquierdos. Os juro que lo primero que pense al volver a subirme a la moto despues de la caida y notar que algo no estaba bien en mi pierna fue en esto, en la posibilidad de tener que abandonar la prueba de hoy.

Pero no ha sido asi. He sido fuerte. No he dejado que de nuevo mi cabeza se apoderase de mi cuerpo y he luchado contra mis miedos. Esta vez si, he sido yo quien ha ganado la partida.



Ya hace unas semana que tenia engañados a Tony y a Jose para que corriesen conmigo. Suelo salir a correr con uno o con el otro y a veces con los dos. Asi que tontin tonteando, medio entre risas medio en serio, como la media era la de Gavà / Castelldefels / Gavà, pues nos apuntamos. Total, solo son 21km de nada!



Durante toda la semana el tiempo no ha hecho mas que variar: sol / lluvia / frio / granizo / nubes / sol otra vez / mas lluiva / mas frio... y la prevision para hoy pintaba mal: 80% de posibilidades de lluvia durante el recorrido de la prueba.
Pero el tiempo se ha portado bien. No ha hecho sol, pero tampoco ha hecho demasiado frio, con lo cual se ha podido soportar sin problemas.

Nos lo hemos tomado con calma, todo sea dicho. El objetivo era acabar, con lo cual no habia ninguna prisa.

Hemos ido los tres juntos, entre buen humor y risas, hasta mas o menos el km 10, donde Jose ha empezado a tener calambres y nos ha dicho que tirasemos.

Mas o menos en ese punto estaban Cristina y Àngel (mi mujer y mi hijo) y Sandra y Júlia (la mujer y la hija de Tony) En la llegada nos han explicado que como ibamos bastante atras, los niños han empezado a preguntar si esa era la carrera donde estabamos participando, por que no nos veian... que majos son... y que cabrones...



Creo que lo peor ha sido del kilometro 12 al 16. Esos 4 son especialmente duros, ya que son el limite al que habitualmente llegamos, con lo cual pasar de eso significaba un esfuerzo. Despues, el cuerpo se acostumbra, la mente se evade, empiezas a ver la meta y el dolor desaparece.

...Y hemos llegado. Ha sido un momento precioso. El poder de la mente en estado puro. Tu cuerpo dice basta, pero tu cabeza sigue, por que sabes que puedes, sabes que debes. Un abandono por semana es mas que suficiente.

Tony ha entrado llorando de la emocion, y yo lo entiendo. Es un esfuerzo muy duro, sobre todo para alguien que no hace ni dos meses que ha empezado a correr en serio.

Tony, no lo dudes ni un segundo, tu padre esta muy orgulloso de ti hoy, seguro.



Yo he entrado con Àngel de la mano, que me estaba esperando justo antes de la meta. Ha sido, de verdad, uno de aquellos momentos que quedan grabados en la cabeza y que si algun dia tengo nietos les contare.

Jose ha llegado algo mas tarde. Estaba agotado, pero lo ha conseguido. Otro que tal. Despues de un accidente de moto en el que se rompio la muñeca tuvo que estar muuuuuucho tiempo sin poder hacer nada de ejercicio. Y como lo suyo es la bici, pues os podeis imaginar, no estaba el horno para ir agarrando manillares, la verdad. Total, que empezo a correr conmigo... y le engañe para lo de hoy... Por cierto Jose, hoy Tony y yo hemos decidido que celebraremos nuestros 40 años en Nueva York, corriendo la marathon. Como eres de nuestra quinta, supongo que no nos abandonaras y te vendras con nosotros, no?



Tios, sois dos putos gladiadores. Me rindo a vuestros pies...

En resumen, si, me he castigado.

Primero, mentalmente, por torpe, por cobarde, por dejar que el miedo se apoderase de mi.

Despues, fisicamente. Por torpe, por cobarde, por dejar que el miedo se apoderase de mi y por no querer volver a sentir que he fallado dos veces seguidas en una semana.

Pero hoy lo he conseguido.. y me he perdonado...



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